En un lejano lugar, ubicado en lo más profundo del bosque, había un
reino de hadas y elfos, donde vivía una princesa que se llamaba Clara. Ella
vivía en un castillo en medio del bosque, junto con los animales y las flores,
rodeada de una exuberante naturaleza.
La princesa Clara, dormía bajo los árboles, y le gustaba, especialmente,
dormir cerca del arbusto de menta. Jugaba con las arañas y conocía a todo tipo
de animales, como las abejas tricolores, las mariposas y los escarabajos.
Su padre, el rey, no quería que su hija, esa hermosa niña de trenzas
doradas como el trigo y dos inmensos ojos azules como el mar, jugase con los
animales de la naturaleza, porque era muy peligroso para ella.
Por esa razón, la princesa, se quedaba encerrada en el castillo y amaba
leer muchas poesías y escribir, especialmente historias donde narraba su
difícil vida, allí encerrada.
Pero al poco tiempo, este reino de hadas y elfos, fue atacado y la
hermosa princesa Clara, fue muerta por los enemigos de la naturaleza y del
hermoso reino ubicado en lo más intrincado del bosque.
Entonces ¿quiénes resultaron ser más peligrosos: los animales y la naturaleza?
¿O los seres humanos, que terminaron matando a la dulce princesa?
¡Y Colorín, Colorado, este triste cuento se ha acabado!
