El Laberinto del Fauno fue una película de animación de Guillermo del Toro. Esta película comenzó en 1944, durante la postguerra. Puso en escena a Ofélia, una niña que tenía 13 años, cuyo padre murió durante la guerra y que acompañaba a su madre.
Durante la película se siguieron las aventuras de Ofelia que se escapó de la realidad, mediante los libros y se refugió en un mundo imaginario en el que es una princesa de Bezmora que se llama Moanna. Pero este mundo evolucionó en paralelo con el mundo real.
En la primera parte vimos que Ofelia y su madre llegaron al molino de Vidal, su padrastro. Pero en cuanto llegó, Vidal le dio claras muestras de no apreciarla. Maltrató a Ofelia y no se ocupaba de su madre. Vimos que Vidal fue un hombre cruel y sádico, que estaba encargado de eliminar a los ultimos guerilleros refugiados en el bosque. Al mismo tiempo, Ofelia descubrió la existencia de un antiguo laberinto dentro del cual había un fauno.
Durante la película, el fauno le puso tres pruebas a Ofelia para liberar a su reino. Las tres pruebas eran: encontrar a un sapo bajo un árbol y sacarle una llave de su vientre, abrir una puerta en una habitación donde estaba un ogro hambriento y ofrecer el sacrificio de la sangre de un inocente. Mientras que Ofelia pasaba sus pruebas, vimos que Mercedes, una criada, era cómplice de los guerrilleros, entre los cuales se encontraba su hermano. Ademas, vimos como Vidal maltrataba a Ofelia y a su madre, porque ¡sólo quería a su hijo!
A lo largo del texto vimos el desarrollo de las relaciones entra Ofelia y Mercedes quien se hizo una confidente y una aliada. Pero al mismo tiempo, se alejó de su madre de quien no era muy cercana. En cuanto a la relación con Vidal, podemos decir que había una fuerte oposición con él que hizo que no le considerase como su padre.
